PONERSE EN MODO ATLETA

 

Solo los elegidos pueden aspirar a una foto como la del podio de un Major.

 

Si no estas ungido por una clase extraordinaria, en este deporte no te queda más remedio que aprender estas tres palabras; TRABAJO, CONFIANZA Y PACIENCIA. 

El final de Marzo suele ser periodo de transición, tras quemar las naves en los campeonatos importantes, toca preparar el asalto a la pista en verano. Si bien mis objetivos solían ser el nacional de cross y acabar quemando todo en Laredo, este año el europeo veterano de Pista Cubierta, era una buena manera de cambiar un poco y probar cosas nuevas.

Tras el Europeo Veterano es hora de Empezar a preparar el Verano.

Lo cierto es que, tras un buen otoño, el invierno ha sido un poco inconsistente; una pizca de pérdida de motivación, clima de perros, una molesta gripe que derivó en lesión por forzar... en definitiva, el invierno no ha sido bueno porque yo no me lo he tomado al 100% y eso en este deporte no se perdona. Solo si perteneces a esa minoría con clase te puedes permitir alguna licencia, pero el resto de los mortales no nos podemos permitir despistes, no si es rendimiento lo que quieres.  

El Europeo Veterano de Madrid en mi caso era más un premio, una pequeña licencia que me permitía tomarme, hace tiempo que quería probar entrenando "por abajo" y disfrutar de correr rápido y quemar las naves desde el principio, estaba un poquito cansado de hacer siempre lo mismo. Fue un fin de semana espectacular, en el que pude disfrutar de buena compañía y de practicar mi pasión.  

Ese momento especial justo antes de darse la salida

El clima de estos eventos es espectacular, no solo se respira atletismo, se respira sabiduría y pasión. Son eventos de los que siempre sacas cosas positivas. No solo por la competición, en la que pude reencontrarme con mi yo atleta, sino por todo lo que la rodea. Ha sido mucha la gente con la que he compartido charlas de entrenamiento y atletismo y que me han inspirado esta reflexión. Como dice mi amigo Sergio Fernández Infestas: "sin estos encuentros no saben igual las competiciones".

Sabiduría

 UN EJEMPLO EXTRAORDINARIO

Paralelamente, otro gran amigo disputaba todo un mundial de media maratón, y lo hacía debutando por la puerta grande, con un marcón y un rendimiento espectacular. Sin duda Camilo Santiago es un ejemplo de superación y una inspiración. Pero Camilo es un atleta ungido, siempre lo he creído así, su rendimiento ha sido desde el primer día, un caso espectacular. Y los que hemos compartido kilómetros con él lo sabemos, y yo he compartido muchos... cuando le aguantaba... hace tiempo que solo le he podido acompañar en bici...  y eso que hubo un tiempo (muy corto) que me pude permitir tratar de disputarle, coincide con mi mejor momento, y sus inicios tras venir del viaje de novios... esto es así, y así será.

Pero lo que le ha hecho llegar a Camilo a la Élite del atletismo con 35 años, no ha sido su clase para correr, esa la clase la tiene más gente. Lo que le diferencia es una confianza ciega en sí mismo y en lo que hace, unido a una capacidad de trabajo extraordinaria. Hay una frase suya que lo describe en este aspecto; "A mi el clima sólo me determina la ropa que me debo poner para entrenar". Camilo es un ejemplo de dominio del modo atleta. Para llegar a ello hay que tomarse este deporte con pasión y disfrutarlo y tener un entorno que te apoye y lo comprenda. Es fundamental tener una cabeza privilegiada para la competición. No hace micho leí en un post de Rober Alaiz, que son necesarias tres cosas para llegar a lo más alto, "Saber entrenar, saber aprender y saber competir". Camilo lleva la competición en la sangre y es donde está su fuerte, su confianza le permite no fallar nunca. Siempre cumple en competición y eso le lleva a ese estado de motivación imparable que cohesiona todo. Todo un ejemplo de dominio del Modo Atleta.

TRABAJO, CONFIANZA Y PACIENCIA

Así pues, si no tienes el privilegio de tener esa clase, no queda otra que dominar estos tres aspectos indispensables para tener un rendimiento óptimo:

TRABAJO:  

Parece de perogrullo, pero se nos olvida. No se puede especular con el trabajo. No se trata de hacer barbaridades ni de tratar de demostrar una capacidad de devorar kilómetros por encima de lo deseable, no es eso. Es tan sencillo como hacer todo y solo lo que te mandan. Para eso está el entrenador. Hay una gran frase de Arturo Martín que dice "TODOS LOS DÍAS, TODOS LOS ENTRENOS, TODOS LOS KILÓMETROS". Se trata de hacer lo que hay que hacer y cuándo hay que hacerlo, lo mismo si te tocan 60kms o 100kms..

CONFIANZA: 

De la mano del anterior. Como dice Luis del Águila; "el atleta entrena y el entrenador piensa". Es sencillo, solamente tienes que hacer lo que te mandan. Tan sencillo que no lo hacemos, entrenamos muchas veces por encima de lo que nos mandan. No regulamos. Regular es fundamental, sobretodo en el atleta veterano. El entrenador sabe llevarnos de manera que evitemos caer en la lesión. Cuando nos vemos bien nos da por forzar un pelín y eso suele ser cerca de las competiciones importantes, es fácil, es lo que buscábamos y estamos bien. En este punto es donde mas nos equivocamos. Luego están las dudas, si no confiamos en lo que estamos haciendo, es imposible rendir bien.

PACIENCIA:

Aquí no hay atajos, solo hay una manera de llegar y es dominando los dos apartados anteriores. Trabaja con confianza y con paciencia y conseguirás tus objetivos. 

No todas las temporadas son iguales, no todas las épocas del año son buenas... ni malas.... no somos ni más ni menos una semana respecto a otra... NO SOMOS MÁQUINAS.  Pero si hacemos las cosas bien, el resultado llega, la mejora es cuestión de tiempo y de paciencia, nunca sabes cuando "vas  explotar" pero al final llega...

Tengo multitud de ejemplos que refuerzan mi teoría y lo tengo claro. Es hora de ponerse en modo atleta. Es hora de dejarse de devaneos y empezar a entrenar cumpliendo los tres aspectos anteriores. Y que cuándo me pregunten, ¿cómo vas?, pueda responder con el clásico, "estoy entrenando bien" pues yo sé que cuando eso se cumple, los resultados llegan.